O mundo agora é dos Millennials


 

Nada mais século XXI do que uma App que dá certo. Para saber se dá certo mesmo, basta cair na simpatia e no gosto dos 200 milhões de brasileiros. Aí já ganhou, o resto não importa. Acesso é sucesso na certa.

A informação e a não informação e o lixo virtual ou não, têm tudo pra viralizar e virar comentário de boteco, hora de almoço, ou falta de assunto mesmo.

O que me chama a atenção é que tudo o que falamos, sentimos, pensamos, imediatamente se transforma em algoritmos (já diria Harari), ou simplesmente _ coincidentemente_ tem alguém que pensou nisso exatamente antes e se deu ao trabalho de reproduzir e enviar. 

Caso vai, caso vem, é a conversa que vinha divagando com um tal amigo meu sobre os vinteiros e recentemente trinteiros Millennials. Acontece que já alguém tinha pensado nisso, não há nada de original, exclusivo e único em mais ninguém neste mundo _ que fique claro_ ou definitivamente você não entendeu nada do que é ser século XXI.

Eis que o tal amigo, que já passou muito longe de ser Millennials, mas que obrigatoriamente precisa e se esforça por se adaptar a eles, pq com eles não tem pra ninguém _que fique claro também_ me mandou esse texto, que reproduzo porque achei super na real.

Está em espanhol, mas ser século XXI é se virar pra entender todos os idiomas, então nem me dou ao trabalho de traduzir. Caso tenha alguma dificuldade, com certeza alguma dessas App's vai te tirar do apuro.

Na verdade, considero que é pertinente essa demanda de urgentemente salvar o planeta, mas o complicado está sendo sair do padrão imediatista, descartável e líquido. Saber esperar também é eco, respeitar os tempos dos processos se faz urgente e resgatar a essência para além da massa algorítmica em que nos tornamos é essencialmente entender o quão humanos somos.

Afinal de contas, o hoje só se deu por um lento e pausado processo do caminhar do ontem.

Lá vai: 

SE METIERON CON LA GENERACIÓN EQUIVOCADA


En la fila del supermercado, la cajera le dice a un señor mayor que debería traer su propia bolsa, ya que las bolsas de plástico no son buenas para el medio ambiente.

El señor pide disculpas y explica: "Es que no había esta moda verde en mis tiempos."

La empleada le contestó: "Ese es ahora nuestro problema. Su generación no puso suficiente cuidado en conservar el medio ambiente."

Tiene razón, le dice el señor: nuestra generación no tenía esa moda verde en esos tiempos:

- En aquel entonces, las botellas de leche, de refrescos y las de cerveza se devolvían,  y las enviaban de nuevo al fabricante para ser lavadas y esterilizadas antes de llenarlas de nuevo, de manera que se podían usar las mismas botellas una y otra vez. Así, realmente las reciclaban.

- Subíamos las escaleras, porque no había escaleras eléctricas en cada comercio ni oficina, así se conservaba energía eléctrica.

- Íbamos caminando a los negocios en lugar de ir en coches de 300 caballos de fuerza cada vez que necesitábamos recorrer 10 cuadras.

- Por entonces, lavábamos los pañales de los bebés porque no había desechables.

- Secábamos la ropa en la soga, no en secadoras que funcionan con energía eléctrica. La energía solar y la eólica secaban verdaderamente nuestra ropa.

- Entonces teníamos una televisión o radio, en casa, no un televisor en cada habitación.

- En la cocina, molíamos en mortero y batíamos a mano, porque no había máquinas eléctricas que lo hiciesen por nosotros.

- Cuando empaquetábamos algo frágil para enviarlo por correo, usábamos periódicos viejos arrugados para protegerlo, no plástico de burbujas.

- En esos tiempos no usábamos maquina eléctrica para cortar el césped; usábamos una que funcionaba a músculo.

- Hacíamos ejercicio trabajando, así que no necesitábamos ir a un gimnasio para correr sobre caminadoras mecánicas que funcionan con electricidad.

- Bebíamos directamente de la canilla o en vaso de cristal cuando teníamos sed, en lugar de usar vasitos o botellas de plástico cada vez que teníamos que tomar agua.

- Cambiábamos las hojas de afeitar en vez de tirar a la basura todo el rastrillo sólo porque la hoja perdió su filo.

- En aquellos tiempos, los chicos iban en sus bicicletas a la escuela o caminando, en lugar de usar a su mamá o papá como taxista.

- Teníamos un enchufe en cada habitación, no varios multicontactos para alimentar una docena de artefactos.

-Y no necesitábamos un aparato electrónico para recibir señales desde satélites situados a miles de kilómetros de distancia en el espacio para encontrar la pizzería más cercana.

- Usábamos teléfonos fijos y sólo había uno cada diez casas, hoy Uds. tienen 10 por cada casa, y cuando los desechan las baterías contaminan la tierra y miles de litros de agua.

- Así que me parece lógico que la actual generación se queje continuamente de lo IRRESPONSABLES que éramos los ahora viejos por no tener esta moda verde en nuestros tiempos.


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Uruguay cambia al mundo